La garantía que ofrece una asesoría jurídica a la hora de tomar una determinación tan drástica como es un divorcio, puede limar las desavenencias entre las partes, lo que puede suponer un alivio cuando se ponga fin de manera definitiva al matrimonio. Además, cuando hay hijos de por medio, se ruega por todos los medios, compartir la custodia. También es posible regular los convenios después de haber sido formalizados.
Cuando un matrimonio decide poner fin a sus gananciales es porque, previamente, han consensuado que es la mejor manera de seguir adelante. No es una toma de decisión fácil, mucho menos cuando hay hijos menores de por medio, ya que se rompe la convivencia, y todo ello puede generar tensiones y conflictos.
En esta tesitura, siempre hay que mirar por llegar hasta el final de la manera más amistosa posible. Esto se puede hacer gracias a la mediación de abogados de separaciones, que darán las pautas necesarias para que ambas partes equilibren sus intereses y no existan futuras disputas.
Hay que tener en cuenta que cada vez son más los matrimonios que se disuelven en España y es por ello que existe un amplio campo de profesionales que se han especializado en esa materia, para ofrecer un servicio de calidad con precios razonables, que casi están estandarizados.
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La importancia de la custodia compartida
En el caso de que los cónyuges que deciden divorciarse tengan hijos menores a su cargo, los expertos aseguran que la mejor opción es llegar a un convenio regulador con la fórmula de la custodia compartida, ya que los niños y niñas podrán pasar el tiempo de manera más equilibrada entre ambos progenitores. En esa misma línea, se ha mostrado complaciente el Tribunal Superior de Justicia, sin embargo, ocurre que la realidad es otra. Hay ocasiones en las que es complicado que se decrete esa custodia compartida, de ahí la importancia de encontrar un buen equipo de abogados que defiendan los intereses de los padres, pero también los de los hijos.
Sin duda alguna, se trata de una situación compleja, sobre todo, cuando se está ante un divorcio donde no se ha llegado a acuerdos contundentes. Es por ello, que contar con especialistas en el tema puede ser una buena opción para alcanzar los objetivos.
Liquidación de gananciales
Respecto a la liquidación de la sociedad de gananciales cabe decir que, con la excepción de Cataluña, Comunidad Valenciana y Baleares, cuando se contrae matrimonio, se hace con el llamado Régimen Económico de Gananciales. Ello significa que no importa los recursos económicos que aporte cada uno, pues todo lo que se obtiene dentro del matrimonio pertenece a ambos cónyuges, a partes iguales.
Sin embargo, ante un divorcio o separación, hay que ejercer un reparto de esos bienes; no obstante, en este caso, no siempre hay que dividir por la mitad todos esos bienes, porque es posible que algunos de esos bienes no pertenezcan a los dos.
En esta línea, se precisa también la asesoría de un abogado especialista en liquidación de bienes gananciales, porque serán los que protegerán los intereses a la hora de atribuir a cada cónyuge lo que verdaderamente le corresponda por ley, o incluso, en base a los acuerdos que se hayan establecido de manera previa.
Una buena asesoría para modificar convenios reguladores
Así pues, tras la separación habrá una sentencia donde se dispondrán, entre otros asuntos, el tiempo de visita a los hijos, la manutención, la compensación a la expareja o el uso de la vivienda familiar. Sin embargo, lo que recoge esa sentencia inicial, siempre es susceptible de ser modificado, con el objetivo de adaptarlo a nuevas realidades que se hayan dado en un determinado plazo de tiempo.
En resumen, si las circunstancias vitales que se dieron a la hora de dictaminar los acuerdos de la sentencia anterior han variado de manera evidente, existe la posibilidad de solicitar una modificación de las medidas, adaptadas a la nueva realidad.