Los tratamientos estéticos para el pecho son populares tanto para hombres como para mujeres. Ya sea que se necesite aumentar el tamaño o reducirlo, los centros estéticos ofrecen servicios de alta calidad.
Los procedimientos estéticos más populares del mundo son los que buscan realzar, corregir y mejorar el aspecto de los pechos, una parte del cuerpo con gran peso en la apariencia física. Su tamaño y su forma juegan un gran papel en la percepción de la imagen corporal y la autoestima, razón por la que los centros estéticos ponen a disposición varios procedimientos para dejarlos al gusto de los clientes.
Tanto mujeres como hombres se realizan cirugías estéticas para mejorar su pecho. En el caso de ellas, el objetivo suele ser el aumento del tamaño, algo logrado con la mamoplastia o el lipofilling de mamas. Para los hombres, las intervenciones suelen realizarse para quitar la grasa y el tejido glandular producidos por la ginecomastia.
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Implantes o lipofilling: ¿cuál elegir?
Muchas mujeres interesadas en el aumento de pecho tienen una gran duda: ¿es mejor colocarse los implantes mamarios tradicionales o utilizar otra alternativa? La también llamada mamoplastia sigue siendo una buena opción, razón por la que es uno de los procedimientos estéticos que más se realizan en todo el planeta. Consiste en la aplicación de prótesis de silicona que se colocan debajo del tejido para que el pecho consiga un mayor volumen.
Los resultados obtenidos con los implantes mamarios son significativos. El nuevo tamaño de los pechos es notorio, tienen una forma bien definida y el cambio es permanente, los cuales representan el fin principal de las pacientes. Es la intervención quirúrgica ideal para aquellas mujeres que buscan aumentar significativamente el volumen de sus pechos para verse más atractivas, también para las que desean equilibrar la diferencia de tamaño entre cada mama o como cirugía reconstructiva.
Por otro lado, el método del lipofilling mamario se presenta como una alternativa más natural. El especialista extrae grasa sobrante de otras partes del cuerpo propio del paciente, como los muslos o el abdomen, para inyectarla en los pechos y aumentar el volumen. Es un procedimiento más seguro, y evita el uso de prótesis artificiales.
Sin embargo, el lipofilling mamario tiene resultados un poco más sutiles en comparación con los implantes, y puede que se pierdan a lo largo del tiempo. Por tal razón, es un tratamiento más recomendable para las que solo desean aumentar sus pechos de forma moderada, o que sencillamente prefieren utilizar su propia grasa a la hora de realizar el aumento.
¿Qué es la ginecomastia?
Una situación muy común en los hombres es la ginecomastia, la que puede llegar a causar un impacto importante en la calidad de vida de quien la padece. Significa el agrandamiento de las glándulas mamarias en los hombres, provocada por un desequilibrio hormonal. Cuando hay más estrógeno y menos testosterona se produce este molesto crecimiento en el pecho.
La ginecomastia es un padecimiento que afecta al 65% de los hombres y que, aunque es más común durante las fases de pubertad y la vejez, puede afectar en cualquier etapa de la vida. No es de extrañar, entonces, que los tratamientos estéticos para reducir la ginecomastia sean tan populares en la actualidad en todo el mundo.
La cirugía para combatir la ginecomastia consiste en quitar la grasa y tejido glandular del área pectoral del hombre, dándole una apariencia más firme y definida. Se puede realizar solo este procedimiento en específico o junto con una liposucción, para así obtener un resultado acorde a las expectativas del paciente.
La ginecomastia, a pesar de ser una condición benigna, tiene consecuencias psicológicas marcadas en el hombre. Provoca baja autoestima y una percepción distorsionada de la propia imagen de la persona, además de crear dificultades a la hora de tener relaciones íntimas. Por estas razones es recomendable la cirugía, y así tener el área del pecho más definida y proporcionada.